viernes, 25 de octubre de 2013

Puerta del Sol: Elementos Característicos

Elementos importantes en esta plaza, aparte de la placa correspondiente al mencionado Kilómetro Cero frente a la Casa de Correos, son la Estatua del Oso y del Madroño, erigida en la boca de la calle del Carmen en 1967 y un popular punto de encuentro; sendas placas en la fachada de la Casa de Correos, dedicadas, una a los héroes del levantamiento popular del 2 de Mayo y la otra a las víctimas de los atentados del 11 de marzo de 2004 y a las personas que colaboraron el día de la catástrofe; la Estatua de la Mariblanca, reproducción de una antigua y popular escultura que adornaba la fuente que allí existía; y el cartel publicitario de neón de los vinos Tío Pepe, último superviviente de los numerosos anuncios que en otros tiempos había en esta plaza.

El último elemento añadido, en 1994, es la estatua ecuestre de Carlos III. Para elegir su emplazamiento fue convocado un referéndum popular, que tuvo lugar en la propia Puerta del Sol, colocando la estatua, provisionalmente durante el período del referéndum, en el lugar que más o menos hoy ocupa. Es una reproducción en bronce de Miguel Ángel Rodríguez y Eduardo Zancada de la obra de Juan Pascual de Mena que se conserva en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. La inscripción en espiral que rodea el pedestal describe brevemente la historia del reinado de Carlos III. El monumento mide nueve metros de altura. Como curiosidad, cabe señalarse que, en él se instaló un dispositivo electrónico para alejar a las palomas que sobre él se posaban continuamente.

Existieron también en este lugar edificios y elementos decorativos hoy en día desaparecidos como fueron los siguientes:
  • Convento de San Felipe.
  • Convento de Nuestra Señora de las Victorias
  • Fuente de la Mariblanca, en memoria de la cual se colocó durante la reforma de 1986 una reproducción de la escultura que la adornaba.
  • Iglesia del Buen Suceso, de la cual han aparecido restos de sus fundamentos durante las obras de construcción de la estación de cercanías Sol-Gran Vía
La Puerta del Sol ha sido y es uno de los principales nudos del transporte público de la ciudad. En ella convergían numerosas líneas de tranvías. La primera línea de metro se inauguró entre Sol y Cuatro Caminos, para la que se construyó, por el arquitecto Palacios, una bella marquesina de acceso en el centro de la plaza, desaparecida para dar paso a la circulación rodada.

Antiguamente, en la plaza tenían su cabecera numerosas líneas de la EMT, hoy convergen tres líneas de metro y se han llevado a cabo las obras de la estación de cercanías Sol-Gran Vía, que, situada bajo la calle Montera, pone Sol en comunicación directa con las estaciones de Atocha y Chamartín. Así mismo, en la actualidad se ha procedido al traslado de la Estatua del Oso y del Madroño a su emplazamiento original, en la confluencia de la calle Alcalá con la Puerta del Sol y la Estatua de la Mariblanca, al inicio de la Calle Arenal.

Fotos: - Puerta del Sol.

martes, 15 de octubre de 2013

Iglesia y Hospital del Buen Suceso: Primeras reformas

En 1693 los problemas que fue sufriendo la Iglesia con el paso del tiempo se agravaron. Se realizaron reparaciones de urgencia pero en 1695 se detecto que uno de los lienzos de la Iglesia estaba amenazado de ruina. Para su solución la Junta del Patronato expuso dos opciones: mantener el tipo de planta que tenía aunque las crecientes muestras de culto exigían un mayor espacio o ampliarla a costa de la lonja añadiendo así un tramo a los pies de la nave principal y las correspondientes capillas laterales, aunque esto obligaría a levantar una nueva fachada y modificar la cúpula.

Los miembros del Patronato adoptaron la segunda propuesta, realizada por José del Olmo por aquel entonces Maestro Mayor de Las Obras Reales, y en el mes de Octubre comenzaron los derribos de las zonas más castigadas, a cargo de Francisco de Bara, Maestro de Obra del Hospital, que debía de ser descendiente del anterior Francisco de Bara que había trabajado con Francisco de Mora hacia años. Comenzó la reedificación del templo.

Se construyó una nueva fachada, aunque en la entrada sobrevivió, bajo un arco de medio punto entre dinteles, la antigua portada dórica con los escudos reales. A mediados de 1697, ya terminada la fachada, únicamente quedaba cubrir la Iglesia y terminar la cúpula. La Iglesia se dio por terminada en 1700.

Pero no acabaron aquí las desdichas de la edificación, los acontecimientos ocurrido el 2 de Mayo de 1808 en la Puerta del Sol, punto importante donde se iniciaron, provocaron numerosos daños tanto en la fachada como en su interior lo que provocó una nueva reforma en 1839 bajo la supervisión de Narciso Pascual y Colomer.

En 1854, debido a la reforma de la Puerta del Sol, Iglesia y Hospital fueron derribados, trasladándose a un nuevo edificio con idéntica finalidad y nombre en la calle de la Princesa, situado en el floreciente Barrio de Argüelles que fue inaugurado el 25 de marzo de 1868, también hoy desaparecido. Su solar lo ocupa hoy El Corte Inglés, lo mismo que prácticamente toda la Puerta del Sol actual. Del primitivo edificio sólo se salvaron unas columnas que fueron colocadas en la llamada “Casa de Bruguera”, en el Paseo de la Castellana, y el reloj, que fue trasladado al vecino Ministerio de la Gobernación, en donde estuvo hasta 1866.

Pocos años después, en 1863, sobre parte de su solar en la Puerta del Sol se levantó e inauguro el Hotel París, uno de los más antiguos de Madrid hasta que el año pasado cerró sus puertas. Sobre el Edificio aún resiste el famoso luminoso de Tío Pepe, convertido en más que un mero objeto publicitario pues ya forma parte del Patrimonio de Interés Turístico.

Frente al hospital del Buen Suceso, había una de tantas fuentes para el abastecimiento público.

Los cimientos de la Antigua Iglesia fueron descubiertos en Junio de 2006, durante las obras para la construcción de la estación de Cercanías de Sol. En un primer momento se pensó desmontarlos para llevarlos a otro lugar pero al final se ha barajado la posibilidad de dejarlos en el lugar encontrado y colocar una capa transparente para que puedan ser observados. Según Patrimonio histórico los restos encontrados pertenecen a la fachada y a las capillas laterales. Aunque se creía que, con su derribo y la reforma de la Puerta en el siglo XIX, había desaparecido todo prácticamente, lo encontrado muestra como sus sillares intactos dejan entrever la forma tan singular de la Antigua Iglesia. Lo sorprendente es que han aparecido a sólo metro y medio de profundidad. Actualmente las obras de Cercanías se encuentras paralizadas, no se sabe muy bien a que es debido, lo que esperamos desde esta página es que los responsables nos den la oportunidad al pueblo madrileño de poder conservar una de sus mayores antigüedades.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Iglesia y hospital del Buen Suceso: Edificio

Del edificio podemos decir que, en un principio, se trataba de un conjunto de construcciones variopintas formado por la antigua Ermita y el Humilladero de San Andrés, algunas viviendas y corrales, todo ello entorno a un patio. Lo más interesante era la Iglesia, formaba parte del conjunto del Hospital, cuyas instalaciones muy modestas y de medianas dimensiones, levantada sobre una planta de cruz latina, hacían que continuamente fuera necesario realizar obras de acondicionamiento. En 1590 los claros síntomas de ruina llevaron a Felipe II ha solicitar la reedificación de la nueva Iglesia y enfermería a la Junta del Patronato.

Podemos asegurar que las trazas de la construcción de la nueva estructura fueron obra del estudio del Arquitecto Mayor de las Obras Reales, por entonces Juan de Herrera (1530-1597) pero sus problemas de salud fueron la causa de que Francisco de Mora (1553-1610) fuera participando más en las Obras Reales. Gracias a la documentación existente en la Junta de Patronato Real ya nadie duda de que fue Francisco de Mora quien tuvo una importante participación en las obras y de que la construcción de la Iglesia fue responsabilidad suya y de su colaborador Diego Sillero.

Su material de construcción principal era el ladrillo revocado, debido a las deficiencias económicas por las que atravesaba Madrid por aquellas fechas. La Sociedad madrileña vivía momentos difíciles durante la última década del siglo XVI, eso unido al traslado de la Corte a Valladolid en 1601, hizo que se paralizaran las obras. Mientras tanto parece ser que el culto continuo en alguna de las instalaciones del Hospital. Una vez que la Corte regresó a la Capital las obras se reanudaron en 1606. Aunque Francisco de Mora no pudo contar con Diego Sillero, pues este había fallecido, para el reinicio de las obras, continuo su labor con el aparejador Francisco de Bara. Las obras de cantería realizadas por Agustín de Argüelles se limitaban a cimientos, pilares y arcos que sustentaban la cúpula, el resto de la edificación era de ladrillo. Su fachada principal, que daba a la Puerta del Sol, estaba compuesta por dos columnas dóricas, arrimadas con su cornisamento, situándose sobre ellas un nicho que albergaba una imagen de la Virgen. Pero quizá el elemento más célebre de su fachada era un reloj, situado en la parte superior. En 1611, tiempos de Felipe III se dieron por finalizadas las obras de la Iglesia.

jueves, 3 de octubre de 2013

Iglesia y hospital del Buen Suceso

De origen confuso, ya que autores como Álvarez y Baena lo atribuyen a Juan II en 1438, lo más probable es que fuera fundado en 1489 por los Reyes Católicos en la localidad de Baza, como Hospital Itinerante para acompañar a la Corte, instalándose sus tiendas allí donde la batalla o la situación lo requería.

Como consecuencia de una epidemia que asoló Madrid, algo que era bastante frecuente en la Villa, Enrique IV mandó construir en las afueras de la ciudad, un Hospital bajo la advocación de Nuestra Señora del Buen Suceso. Parece ser que fue Carlos I quien lo fijó definitivamente en Madrid, fuera de los muros de la ciudad, junto a una Ermita que dedicada a San Andrés había frente a la Puerta del Sol, confirmándose su fundación por Bula de Clemente VII el 28 de enero de 1529. Este hospital, se había alzado, entre lo que hoy son las calles de Alcalá y Carrera de San Jerónimo. Carlos I habilitó parte del edificio, para soldados y criados de la Casa Real. La construcción de la nueva casa del Hospital termino en el año 1561, ya en tiempos de Felipe II.

Tanto la Iglesia, terminada en 1611, como el Hospital, dependía directamente del Patrimonio Real, y en su delegación del Patriarca de las Indias, por lo que durante el Antiguo Régimen fue muy frecuentado por criados de la Casa Real, Guardias de Corps, Alabarderos, y personas vinculadas al Gremio de Plateros que instalaron allí su Congregación. En 1757 pasó a depender de la Parroquia Patriarcal.

También conocido como Real Hospital de Corte, el nombre de “Buen Suceso” le viene de una imagen de la Virgen encontrada por dos frailes en una cueva y traída de Roma en 1612 por Gabriel Fontanel, hermano mayor de la enfermería del Hospital, y colocada en una capilla de la Iglesia tras una solemne procesión. Al ser bendecida por el Papa Pablo V, éste exclamó, refiriéndose al hallazgo, que había sido un buen suceso tomando desde entonces la denominación del Buen Suceso.